LA LEY DICTAMINA QUE TODOS TENEMOS DERECHO A UNA VIVIENDA DIGNA Y ADECUADA

Hay muchas  entidades sin animo de lucro ESAL que luchan por conseguir un techo para los más necesitados.

A la falta de trabajo, de un salario y de un plato caliente en la mesa (problemas a los que de algún modo tratan de poner solución otras ESAL) hay que sumar la carencia de una casa… Un problema que se agrava cuando esa pobreza toca a casos más extremos como el de las familias con niños.

Trabajar para que esas miles de personas que pasan los días y las noches en casas de familiares y amigos o en lugares muy poco recomendables (como zonas abandonadas o casas okupas) tengan una vivienda digna, es el objetivo de un nutrido grupo de ESAL que operan a nivel mundial.